Ya desde hace unos años se viene gestando una revolución que va a cambiar en mucho nuestros hábitos, facilitando la vida en grado máximo. La irrupción de la fibra óptica en los hogares, aspecto en el que España es una potencia mundial por delante de grandes países europeos, ha simplificado muchos trámites administrativos y gestiones que antiguamente requerían de nuestro desplazamiento hasta el correspondiente edificio: ayuntamiento, banco, hacienda, diputación, registro de propiedades, consulta del catastro, seguridad social, ambulatorio, etc etc etc Estos trámites podían requerir varios "viajes" y varios días o semanas de espera, realizándose ahora desde casa online y en muchos casos resolviéndose la gestión de forma inmediata. Esto supone un ahorro de tiempo excepcional.
Otro aspecto al que ya estábamos acostumbrados era la realización de compras por internet. Actualmente el usuario puede informarse de los productos existentes en el mercado, compararlos y comprarlos en la tienda online que quiera y al mejor precio. Por supuesto, a la hora del día en que está libre y con entrega a domicilio, incluso en el horario preferido por el cliente.
¿Qué nos ha traído el COVID-19 que no hiciéramos anteriormente en Internet?
En primer lugar el Teletrabajo. Los trabajadores cuya actividad se desarrolla delante de un ordenador han podido seguir haciéndolo desde casa, previa adaptación de su equipo al trabajo compartido a través de la nube si necesitaban acceder a los archivos de la empresa. Se están utilizando mucho las plataformas de compartición de contenidos (Onedrive, Google Drive, Dropbox), las redes de mensajería (WhatsApp para el Smartphone, Yammer de la plataforma Teams de Microsoft) y los programas de videoconferencia (Microsoft Teams, Zoom, Google Meet, Skype, Cisco Webex...). Entre todas las plataformas destaca por comodidad, completitud e integración con el resto de programas la plataforma Teams de Microsoft, que viene incluida en el paquete Microsoft Office 365, permitiendo sin más trabajo que la instalación de Office la posibilidad de trabajar en red virtual con el equipo de la empresa a través de Internet. Esta es la solución que han elegido las grandes empresas.
En segundo lugar, la Teleformación. Los profesores y alumnos se han visto obligados de un día para otro a dar y recibir clase a través de la Web. Las plataformas utilizadas deben permitir intercambiar documentos, enlaces, vídeos, controlar a cada alumno y las entregas de sus trabajos. Destaca por comodidad y facilidad de instalación Google Classroom. Otra plataforma ampliamente utilizada para crear cursos virtuales es Moodle, de amplia implantación en el marco universitario. Existen muchas otras plataformas, pero estas dos se llevan la palma. Si bien los alumnos se ven privados del necesario contacto interpersonal para desarrollar una buena educación social interpersonal, no cabe duda que cuando las circunstancias obligan hay que gestionar los obstáculos de la forma más óptima posible.
Un nuevo mundo.
Internet ha traído una forma nueva y más eficiente de hacer las cosas, y se ha impuesto porque supone un gran ahorro de tiempo y dinero. Quien no domine este nuevo mundo va a ser un "analfabeto digital", y de nada sirve quejarse de la propia desidia: el que quiera formarse puede hacerlo con cantidad de cursos gratuitos o no que se ofrecen desde multitud de organismos públicos y privados.
Por otro lado este nuevo mundo añade una nueva forma de trabajar a la empresa, la forma digital o a través del ordenador, Smartphone y tablet, al que deben adaptarse los comercios y las empresas. Hoy día el antiguo escaparate del comercio se ha convertido en una página web, necesitándose conocimientos de márketing digital y de e-commerce para poner los productos en venta a través de dicha página.
La Transformación Digital está aquí, y si bien el respeto y la confianza personal siguen siendo lo más importante, hay que incorporar cuanto antes esta nueva forma de trabajo a nuestras vidas.